Los izquierdistas en todo el mundo están mostrando su disposición a pelear sucio en su desesperación por frenar al supuesto fascista y neoliberal presidente electo de Argentina, Javier Milei. El libertario, abierto defensor del libre mercado, asumirá el cargo el 10 de diciembre de 2023. Esto está llevando a la izquierda a un comportamiento caprichoso y visceral que puede ser conocido como el síndrome irracional anti Milei.
La demonización de Milei en campaña electoral no logró impedir su aplastante victoria el 19 de noviembre. Ahora sus adversarios se apresuran a socavar su gestión incluso antes de que se posesione, una locura. Si se logran imponer, los perdedores serán los argentinos, quienes están sumidos en la decadencia económica del peronismo desde hace generaciones.
La victoria de Milei dejó en shock a la izquierda a nivel mundial y sus medios y portavoces están con el cuchillo entre los dientes. Están promoviendo la idea de que Milei es una “amenaza existencial para la democracia argentina” con “una visión de exclusión, división y cortes draconianos”, como lo resume la Internacional Progresista. Limitar el poder del Estado y dejar a las personas solas es draconiano únicamente para aquellos que temen a la libertad.
Un grupo de 100 economistas encabezados por Thomas Piketty y José Antonio Ocampo —mentores de los socialistas hispanoamericanos— compartieron una carta previo a las elecciones. En ella advertían de que Milei provocaría una “ devastación económica” y un “caos social” en Argentina.
Estos ideólogos miopes ignoran que las políticas que ellos mismos promueven —como el proteccionismo comercial paralizante y la aberrante redistribución de la riqueza— han conducido a Argentina a una profunda desolación económica, social y política. Incluso el Instituto de Estadística de la nación informa de que en 2023 la pobreza alcanzará el 40%. Los vecinos Brasil, Chile y Uruguay tienen tasas de pobreza del 24,3%, 4,8% y 10,4%, respectivamente. Asimismo, hasta el Banco Central no puede ocultar la inflación galopante que supera el 143%.
Abro mini-hilo con lo que deberá “agarrar” Milei el 10 de Diciembre. 🧵
Agradezco el RTW! 💪
– Reservas Netas Negativas en niveles históricamente bajos.
Sigue… pic.twitter.com/MIsZJtBiKi
— Salvador Vitelli (@SalvadorVitell1) November 20, 2023
Actualmente, la estrategia de la izquierda consiste en fabricar conexiones ideológicas o políticas entre anteriores regímenes autoritarios y Milei. Un artículo de The Guardian distorsiona descaradamente la realidad al afirmar que Milei quiere emular las políticas económicas de la dictadura militar de 1976. También insinúa que el economista libertario tiene una actitud de beneplácito negacionista hacia la dictadura.
Esto no sorprenderá a los lectores del Impunity Observer, pero la verdad es contraria a lo que el ignorante voluntario The Guardian ha pregonado. Milei ha criticado firme y abiertamente a la dictadura en múltiples ocasiones en los últimos cinco años. En 2018, durante una entrevista con el periodista argentino Jonatan Viale, Milei argumentó que las políticas económicas de la dictadura eran similares a las de las administraciones anteriores: centradas en la expansión del Estado y el gradualismo.
Sin embargo, los medios progresistas no son los únicos que intentan socavar la presidencia de Milei. Los sindicatos y las organizaciones de izquierda están reuniendo a sus tropas de orcos para bloquear el camino hacia la liberalización, literal y figuradamente.
El 23 de noviembre, organizaciones argentinas de extrema izquierda, también conocidas como piqueteros, anunciaron protestas contra el gobierno de Milei para el 19 y 20 de diciembre. Esta fecha conmemora los 22 años de la crisis económica de 2001. Eduardo Belliboni —líder del movimiento piquetero Polo Obrero, afiliado al Partido Obrero, de corte marxista— se muestra abierto sobre sus inclinaciones hacia el desafío y el sabotaje. “Estamos preparados para enfrentarnos a este nuevo gobierno, espero que le vaya muy mal”, explica, refiriéndose a la inclinación de su organización por la violencia: bloqueos, vandalismo y ocupaciones. El espectro de la violencia directa contra Milei, sus allegados y sus familias también es real.
Manuel Adorni le pregunta a Javier Milei por las posibles protestas del peronismo en la calle durante su gobierno:
“Se aplicará la ley y no me voy a dejar extorsionar por los violentos. Si no no resolvemos más esto” pic.twitter.com/4usp8xc97V
— Wall Street Wolverine (@wallstwolverine) November 21, 2023
Aunque Milei ha dicho explícitamente en múltiples ocasiones que mantendrá la red de planes sociales para los argentinos más vulnerables, las organizaciones de izquierda han recurrido al alarmismo. Los piqueteros se hacen eco de la línea de que Milei “despojará a los trabajadores de sus derechos”.
De hecho, Milei quiere eliminar a los parásitos intermediarios que se han incrustado en el Estado. Estos intermediarios cobran una comisión por administrar y repartir las prestaciones sociales. Los piqueteros son una mafia, un brazo de los dirigentes y extorsionan a los más vulnerables para que se sumen a falsas protestas.
Expresidentes y líderes de izquierda de la región han condenado a Milei y respaldado las intimidaciones. El expresidente socialista uruguayo José Mujica, por ejemplo, ha advertido de que si Milei aplica políticas económicas liberales habrá una “resistencia inevitable en las calles”.
Paradójicamente, Mujica no dijo una sola palabra cuando las políticas económicas del actual ministro de Economía, Sergio Massa, desencadenaron una crisis inflacionaria y un repunte de la pobreza. Asimismo, en 2019, cuando la dictadura chavista reprimió violentamente a manifestantes pacíficos, Mujica afirmó que “los manifestantes deben evitar ponerse frente a los tanques de la policía”.
Los medios de comunicación progresistas, los líderes sindicales y los políticos socialistas afirman que Milei es una amenaza para la democracia. Sin embargo, son ellos los antidemocráticos, ya que se niegan a aceptar la voluntad popular expresada en las urnas, la cual le dio la aplastante victoria electoral a La Libertad Avanza. Milei fue muy claro con su mensaje de campaña, luciendo incluso una motosierra en alguna ocasión. Su abrumador respaldo electoral, de más de 11 puntos de diferencia, le brinda autoridad para recortar el enorme Estado argentino que empobrece año tras año a sus ciudadanos.
Cada vez que un presidente que lucha por la libertad toma posesión, estos conocidos actores de la izquierda cavernaria inician una serie de agresiones físicas, mentiras y campañas de demonización para socavarlo. Mientras tanto, permanecen en silencio o incluso colaboran con regímenes totalitarios, como los de Cuba, Nicaragua y Venezuela; al diablo la democracia.
Las reformas propuestas por Milei no solo son necesarias para evitar el total colapso del Estado argentino, sino que cuentan con el respaldo mayoritario de la población. Los izquierdistas están demostrando que solo les importa la voluntad del pueblo cuando ganan sus caudillos. Si se imponen otros movimientos políticos, los izquierdistas mueven cielo y tierra para provocar su ruina, y por ende, la del país.
Ya lo han hecho en Chile, Colombia, Ecuador y Panamá en los últimos años. La cavernaria izquierda argentina aplicará la misma receta. Al final, el engaño y la violencia es todo lo que les queda contra el fenómeno de Milei.
La izquierda y sus dirigentes parecen olvidar que las nefastas políticas peronistas —basadas en la redistribución de la riqueza y la llamada justicia social— han llevado a Argentina a su crítica situación actual. La única manera de que Argentina ponga fin a sus crisis es reestructurando el Estado y adoptando reformas de libre mercado, no hay más. Para que Argentina vuelva al camino de la prosperidad, Milei necesitará determinación y fuerza para enfrentarse a los totalitarios enemigos de la libertad.
Milei tiene una oportunidad de oro que no puede desaprovechar.
¡Viva la libertad carajo!
Este artículo refleja únicamente la opinión del autor, mas no necesariamente la opinión del Impunity Observer.
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