El 6 de abril, el representante estadounidense Chris Smith (R-NJ) expresó su preocupación a la secretaria adjunta de Estado, Wendy Sherman, sobre las sanciones del Departamento de Estado (DOS) a través de la lista Engel contra la fiscal general de Guatemala, Consuelo Porras. El DOS ha estado usando estas sanciones para presionar a miembros de la comisión postuladora de fiscal general guatemalteca con el fin de evitar la reelección de Porras. Smith dijo que la intervención estadounidense en este ámbito incurre en la violación de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas. Yo entiendo que él y la representante María Elvira Salazar (R-FL) ya han enviado una carta al DOS respecto a estas preocupaciones.
La audaz declaración de Smith, seguida de una carta, llega en un momento crítico. La comisión de postulación tiene agendado entregar la lista de seis candidatos hasta el 20 de abril. De esos seis, el presidente Alejandro Giammattei escogerá al siguiente fiscal general, quien asumirá el cargo el 15 de mayo.
Usando la lista Engel para eliminar un candidato de la consideración para fiscal general es un acto criminal e inconstitucional en Guatemala. Además, las leyes extranjeras no tienen validez allí, todos los individuos deben gozar su presunción de inocencia y no se puede limitar los derechos de una persona sin el debido proceso.
A pesar de la ilegalidad de una posible eliminación de candidatura, un número de comisionados — todos prominentes abogados— votaron para hacerlo sin importarles aquello. Esto indica que deben haber estado bajo una presión significativa. Los agentes del DOS los han amenazado con la revocatoria de sus visas estadounidenses si no seguían la línea de acción del DOS.
El secretario adjunto para asuntos del hemisferio oeste, Brian Nichols, ha declarado que las sanciones de la lista Engel generan un estigma que los receptores “no pueden sacárselo fácilmente”. El DOS abusa su autoridad mediante el uso de sanciones para que los comisionados tengan miedo a ser estigmatizados.
Un reporte del DOS al Congreso menciona que las sanciones de la lista Engel se basan en “información o alegaciones creíbles… desde medios y otras fuentes”. Estos estándares arbitrarios estorban el trabajo de Porras como una aliada efectiva para las agencias estadounidenses de cumplimiento de la ley, recientemente alabada por el Departamento de Tesorería.
Un objetivo establecido por la Ley de Cooperación Mejorada de Estados Unidos y el Triángulo del Norte, ley que da paso a la creación de la lista Engel, es “implementar procesos transparentes y basados en méritos para la selección de fiscales y jueces”. Además de violar la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, la intervención del DOS en el proceso de selección de fiscal general viola la intención del Congreso en esta ley.
El DOS debería proveer al Congreso con una lista de razones por las que se sanciona a Porras. Comentarios públicos del DOS, notas de prensa y otras fuentes indican que una de las razones de esta sanción es el despido de Juan Francisco Sandoval, exjefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), por parte de Porras.
El DOS había otorgado un premio recién creado para el campeón anticorrupción a Sandoval en febrero de 2021. Esto se dio a pesar que el procurador general de Guatemala había presentado una denuncia penal en contra de Sandoval. Eso fue por la liberación que él otorgó sin autoridad alguna a la infame Odebrecht para la demanda de Guatemala por $384 millones en contra de la compañía. Sandoval había sido acusado de muchos crímenes. Un juez, por ejemplo, certificó lo conducente a lo penal por forzar a testigos a dar falsos testimonios en un juicio.
Smith comentó que el DOS había ignorado las dos ofertas de Porras a través de canales oficiales para clarificar sus razones para el despido de Sandoval. Smith pidió a Sherman que acepte la oferta y que comparta información con el Congreso. El silencio del DOS levanta cuestionamientos en cuanto a los esfuerzos del DOS por prevenir la elección de Porras para un segundo periodo.
En una audiencia sobre la independencia judicial en Centroamérica de junio 9 de 2021, Smith mencionó la importancia de la independencia judicial, el respeto por el constitucionalismo, la lucha contra la corrupción y la promoción del imperio de la ley en Guatemala. Él dijo que estos problemas tienen apoyo bipartidista, pero que problemas surgen en la lucha contra la corrupción “cuando se distorsiona para encajar una agenda ideológica — cuando las llamadas campañas anticorrupción no son aplicadas de una forma ecuánime, pero se las usa como herramienta partidista e ideológica en contra de un lado para avanzar en los intereses de otros— ”.
Smith dijo “una examinación honesta del récord revelaría que este viene en parte de los Estados Unidos, incluyendo dos exembajadores, Todd Robinson en particular, quienes se han alineado con actores políticos de izquierdas dentro del país y en el extranjero”.
Muchos demócratas esperan un maremoto en las elecciones del Congreso en este año, que le dará a los republicanos el control del Congreso por los próximos dos años. Las políticas radicales y desastrozas de Biden hacen esto casi una certitud. Estas son las mismas políticas que Biden trató de imponer en Guatemala cuando era la mano derecha de Barack Obama en Centroamérica. Los guatemaltecos han rechazado estas políticas y han empezado a tratar de recuperar su sistema judicial del control del DOS.
El DOS está abiertamente tratando de recuperar el control del Ministerio Público. El canciller guatemalteco ha pedido a las embajadas extranjeras en Guatemala, incluyendo a la estadounidense, que “respeten las leyes y no interfieran en asuntos internos” en cuanto al proceso de selección de fiscal. El DOS incurre en este riesgo porque su fallo significaría exponer sus criminalidades en el pasado. Smith y Salazar son unos de los primeros en darse cuenta de esto. Más miembros del Congreso se unirán al enterarse de la perfidia del DOS.
Los guatemaltecos deberían saber que si se enfrentan en contra de la intimidación del DOS, pronto tendrán ayuda. El DOS hoy no representa a los principios estadounidenses. En lugar de estar en concurrencia con el actual DOS, esos comisionados que sucumben a su intimidación se pudiesen encontrar en el foco de atención debido a su fallo al momento de adherirse a las leyes guatemaltecas.
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