La agenda antiestadounidense del régimen de Joe Biden coincide con las agendas de nuestros tiránicos enemigos en el extranjero. Una carta enviada a Biden el 20 de febrero por ocho senadores estadounidenses decía que las sanciones de su Gobierno habían atacado a los aliados de Estados Unidos e ignorado la corrupción de sus adversarios.
Israel e Irán son los ejemplos más claros. El haber atenuado las sanciones por parte del régimen de Biden y habilitar dinero para Irán dieron poder a la dictadura y a sus terroristas apadrinados: Hamás, Hezbolá y los Houthis. El régimen de Biden comparte la responsabilidad de la masacre de israelíes perpetrada por Hamás el 7 de octubre.
El general retirado Jack Keane declaró a Mark Levin que la diplomacia de Obama y Biden hacia Irán no ha logrado alcanzar la estabilidad en Oriente Próximo ni disuadir la agresión iraní. Keane dice que Biden ha rechazado todas las recomendaciones militares de acción contra Irán que habrían cambiado su comportamiento.
Por motivos políticos electorales, Biden pareció apoyar a Israel tras la masacre del 7 de octubre. Sin embargo, rápidamente dio publicidad al sufrimiento de las víctimas palestinas no combatientes de la subsiguiente guerra para presionar a Israel para que no destruyera a Hamás. No destruir a Hamás envalentonaría a tiranos y terroristas en todas partes.
El maltrato del régimen de Biden a los migrantes con destino a Estados Unidos demuestra que su preocupación por el sufrimiento de los civiles palestinos en Gaza es fingida. Las declaraciones de apoyo a Israel por parte del régimen buscan engañar a los votantes estadounidenses y ocultar su agenda antiisraelí.
El régimen somete a los migrantes a los abusos de los cárteles criminales para ocultar que está inundando Estados Unidos a propósito. La asociación cívica guatemalteca Liga Pro-Patria ha declarado que el régimen de Biden “podría expedir visados a los migrantes para que pudieran evitar a los costosos y violentos cárteles. Sin embargo, entonces el régimen y sus socios mediáticos no podrían negar la política deliberada de fronteras abiertas”.
Sara Carter ha informado que la fiscal general de Guatemala, Consuelo Porras, está investigando “el tráfico, abuso y desaparición de niños” de Guatemala. Porras está solicitando la colaboración del fiscal general de Texas, Ken Paxton, porque los delitos involucran a Texas. Las denuncias recibidas por el Ministerio de Porras afirman que las oenegés financiadas por los contribuyentes estadounidenses que operan dentro y fuera de Estados Unidos son cómplices de los delitos.
El Departamento de Estado de EE.UU. (DOS) sancionó a Porras en 2021 por despedir al entonces fiscal Juan Francisco Sandoval. Entre otros delitos, Sandoval habría obstruido una investigación del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. sobre blanqueo de dinero de fondos de USAID. Porras también aplicó correctamente la ley a otros fiscales y jueces que, como Sandoval, habían ejecutado la agenda criminal del DOS en Guatemala.
El régimen de Biden y el DOS dirigieron un fraude electoral en 2023 para hacer presidente de Guatemala a su títere comunista Bernardo Arévalo. Porras presentó un informe a la autoridad electoral detallando el fraude. Incluso como presidente electo, Arévalo cometió delitos, dirigidos por el DOS, intentando destituir a Porras antes de que su mandato terminara en mayo de 2026. Como Presidente desde el 14 de enero, Arévalo ha cometido más delitos contra Porras.
La carta de los ocho senadores a Biden decía que el ex presidente guatemalteco Alejandro Giammattei “fue un fuerte socio en seguridad para EE.UU. comprometido con la extradición de varios traficantes de personas”. Cuando Giammattei buscó cooperación contra la migración ilegal, el régimen de Biden se negó. En consonancia con esto, la Liga Pro-Patria declaró: “El DOS utilizará al títere Arévalo para asegurar el flujo continuo de migrantes y narcóticos a través y desde Guatemala”.
Giammattei y Porras trabajaban bien juntos porque ambos estaban comprometidos en la lucha contra el tráfico de personas y el narcotráfico. Ahora Porras —la mejor aliada de Estados Unidos contra los flujos ilegales— no cuenta con el apoyo del Ejecutivo. Más bien, el régimen de Biden y Arévalo están empecinados en sacarla del cargo.
Una verificación de la promoción intencionada de la inmigración ilegal por parte del régimen de Biden es que impide que las autoridades de Texas la combatan. Además de la cooperación de Texas, los agentes federales deberían cooperar con Porras para proteger a los niños de los abusos.
El 17 de abril, el Senado votó a favor de desestimar el juicio político contra el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas. Ningún demócrata expresó su apoyo a un juicio completo.
Esta es la primera vez en la historia de EE.UU. que el Senado no ha actuado constitucionalmente de acuerdo con los artículos de juicio político de la Cámara de Representantes. El líder de la mayoría del Senado Chuck Schumer (D-NY) y el régimen de Biden saben que un juicio a Mayorkas revelaría al público los indescriptibles horrores —muerte, violación, servidumbre, enfermedad, etc.— que los inmigrantes sufren por parte de los cárteles criminales impulsados por la política del régimen de Biden.
En el colectivismo, el Estado es madre, padre y maestro. El individuo no tiene derechos y existe para servir al gobernante. Esto es coherente con la amoralidad de utilizar o ignorar el sufrimiento humano para promover una agenda política. El régimen de Biden lo hace criticando a Israel en lugar de a Irán y Hamás por el sufrimiento civil palestino y sometiendo a millones de inmigrantes a horrores indescriptibles.
La inhumanidad y deshonestidad del régimen de Biden son indicativas de su deseo de mantener y aumentar su control de nuestra sociedad. Esto está dañando la causa de la libertad, la paz y la prosperidad en casa y en el extranjero. Debemos darnos cuenta de la destrucción intencionada de nuestro país por parte del régimen y expulsarlos de sus cargos mientras podamos.
Join us in our mission to foster positive relations between the United States and Latin America through independent journalism.
As we improve our quality and deepen our coverage, we wish to make the Impunity Observer financially sustainable and reader-oriented. In return, we ask that you show your support in the form of subscriptions.
Non-subscribers can read up to six articles per month. Subscribe here.